La serigrafía es una técnica de marcaje consistente en imprimir una tinta a través de una malla tensada en un marco (pantalla) cuya capa superior es fotosensible. El fotolito con el diseño contiene zonas que permiten el paso de la luz, mientras que otras son opacas.
Este fotolito se situa encima de la tela y posteriormente se ilumina con luz ultravioleta. El paso de la tinta se bloquea en las áreas dónde no habrá imagen mediante una emulsión o barniz, quedando libre la zona dónde pasará la tinta. Se situa la pantalla sobre el soporte a imprimir y se hace pasar la tinta a través de ella, aplicándose una presión moderada con una rasqueta, generalmente de caucho.